Ahora Guillem Milkyway se ha pasado al disco de finales de los setenta y principios de los ochenta. Con el mismo tono optimista de siempre, diga lo que diga. La revolución sexual se podría perfilar como una magnífica canción del verano, si los dijis de este país entendieran algo de música. Pero es verdad que ya hacen bastante queriendo parecer cool, no podemos pedirles más. El resto del disco es parecido, letras sobre el amor, algo pueriles, pero que despiertan la alegría a cualquiera. Y además lo hacen muy bien. La estética seudofuturista (y ese casco que le robaron a Darth Vader) tampoco les queda mal, pero su actuación en Hundamos Eurovisión no podemos decir que fuera memorable, y es que el que directamente cante Milkyway sin el apoyo de los cinco Brady's no es lo mismo. Resultaba más divertido antes. Afortunadamente para ellos, no irán a Eurovisión, y por tanto, no se los cargarán. Yo sigo muy contento. Y me sigue gustando el ñoñipop. Y para el que tenga dudas, esto si se admite dentro de la intelectualidad.
1 comentario:
Tal vez deberían haber ido ellos a Eurovisión.
Aleteos!
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