El trabajo conjunto de Wyler y Davis dio como resultado alguno de los más loados dramas del cine clásico norteamericano, empezando por la maravillosa Jezabel y llegando a su cénit con la terrible historia de Regina Hubbard, encarnada por una Bette Davis que quizá sólo estuviera más cruel como Baby Jane, sólo que a Baby Jane la podría salvar quizá la "locura".
La Loba, como su propio apodo indica, es un animal deliveradamente malvado a quien no le importa comerse a quien sea necesario para lograr sus objetivos. Davis construye una de las malas malísimas más sobrecogedoras de la historia del cine apoyada por el resto del reparto (que aún así no logran hacerle la más mínima sombra) y la realización de un director que es capaz de mostrar lo despiadado del ser humano con una sutileza y elegancia que ya raramente se ve.
Obra magna basada sólo en tres cosas: guión, dirección y actores... si siempre lo hemos dicho.
La Loba, como su propio apodo indica, es un animal deliveradamente malvado a quien no le importa comerse a quien sea necesario para lograr sus objetivos. Davis construye una de las malas malísimas más sobrecogedoras de la historia del cine apoyada por el resto del reparto (que aún así no logran hacerle la más mínima sombra) y la realización de un director que es capaz de mostrar lo despiadado del ser humano con una sutileza y elegancia que ya raramente se ve.
Obra magna basada sólo en tres cosas: guión, dirección y actores... si siempre lo hemos dicho.
1 comentario:
¡Cómo me apetece volver a verla!
Publicar un comentario