Esa preciosa canción de The Turtles da título y pone punto final a esta preciosa película de Won Kar Wai, película de desamor sobre tres hombres. Dos hombres, amantes, rompen y vuelven a unirse sentimentalmente, dentro de una relación tormentosa. Entre dichas pausas, aparece otro aparentemente heterosexual que se cruza en el camino de uno de ellos, el menos torturado, Tony Leung, quedando clara una atracción mutua entre ambos. Silencios que dicen mucho, planos largos visualmente soberbios, violencia y afectividad contenida... dentro de una película tan tormentosa como sus propios personajes y las relaciones que establecen. Es complicado hablar de ella, cuando la que tengo en mente es In the mood for love, de la que hablaré pronto, y de la que esta película parece una clara antecesora, en muchas cosas. Pero hasta entonces, me lo tengo que pensar.
miércoles, 9 de julio de 2008
Happy together.
Happy together (Won Kar Wai, 1997)
Esa preciosa canción de The Turtles da título y pone punto final a esta preciosa película de Won Kar Wai, película de desamor sobre tres hombres. Dos hombres, amantes, rompen y vuelven a unirse sentimentalmente, dentro de una relación tormentosa. Entre dichas pausas, aparece otro aparentemente heterosexual que se cruza en el camino de uno de ellos, el menos torturado, Tony Leung, quedando clara una atracción mutua entre ambos. Silencios que dicen mucho, planos largos visualmente soberbios, violencia y afectividad contenida... dentro de una película tan tormentosa como sus propios personajes y las relaciones que establecen. Es complicado hablar de ella, cuando la que tengo en mente es In the mood for love, de la que hablaré pronto, y de la que esta película parece una clara antecesora, en muchas cosas. Pero hasta entonces, me lo tengo que pensar.
Esa preciosa canción de The Turtles da título y pone punto final a esta preciosa película de Won Kar Wai, película de desamor sobre tres hombres. Dos hombres, amantes, rompen y vuelven a unirse sentimentalmente, dentro de una relación tormentosa. Entre dichas pausas, aparece otro aparentemente heterosexual que se cruza en el camino de uno de ellos, el menos torturado, Tony Leung, quedando clara una atracción mutua entre ambos. Silencios que dicen mucho, planos largos visualmente soberbios, violencia y afectividad contenida... dentro de una película tan tormentosa como sus propios personajes y las relaciones que establecen. Es complicado hablar de ella, cuando la que tengo en mente es In the mood for love, de la que hablaré pronto, y de la que esta película parece una clara antecesora, en muchas cosas. Pero hasta entonces, me lo tengo que pensar.
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2 comentarios:
Es una de mis películas favoritas. Tú la describes muy bien. Y la música de Piazzola..
La sensación de desarraigo en un país que está en las antípodas, la belleza dolorosa de la separación de los amantes, las incursiones solitarias del amante "caprichoso" en los lugares de encuentro, las cataratas del Iguazú, la grabación de Tony Leung en el magnetofón con el sollozo..
Es lo que más me gusta de un director que siempre me llega.
Es preciosa, estoy de acuerdo. Pero yo me quedo con In the mood for love. Mi problema es que vi esta después de la otra... Algún día la posteare, pero tengo que tener cuerpo para ello.
Un saludo.
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