miércoles, 22 de octubre de 2008

Sexografías

Sexografías (Gabriela Wiener, Editorial Melusina, 2008).

Decía en uno de sus comentarios el amigo dvd que hay demasiada gente que escribe sobre sexo. Me atrevo a decir que no sólo es que haya mucha gente que escribe sobre sexo, sino que hay mucha gente que escribe demasiado sobre el sexo en cuanto a acto, y se olvidan de todo lo que el sexo significa o conlleva, mucho más que el puro placer físico. Para resarcirnos ocasionalmente aparece alguien que habla de algo más.
Aparte de su columna en El país, Sexografías es el título de una presunta compilación de artículos que la peruana afincada en Barcelona Gabriela Wiener ha venido escribiendo a lo largo de los años para distintas revistas y periódicos. Y digo presunta compilación porque ya explica ella misma que muchos de los retazos de su vida que están en él se han rehecho para que pudieran pertenecer a este libro, ejemplo de periodismo "gonzo", como lo quieren llamar, el que se realiza con la implicación del investigador hasta las últimas consecuencias.
Una amiga definía a Wiener como "atrevida". Creo que es quedarse muy corto. Wiener, en busca del mundo que nos rodea, no duda en desnudarse en cuerpo y alma para exponer su vida y sus observaciones al mundo, cuenta historias que ningún otro contaría en primera persona sin que una muestra de arrepentimiento asome durante la lectura, y sin embargo consigue ser elegante incluso en los más sórdidos ambientes.
Sexografías es un viaje de Wiener a muchos submundos que tienen que ver no sólo con el sexo per se, sino con los placeres vitales y sus posibles sustitutos. Con la vida que rodea a todo lo que implica al sexo, desde la prostitución hasta el embarazo deseado, no quedándose únicamente en la anécdota del acto en sí, que, como bien reflejan sus páginas, no es lo más importante. Wiener observa, anota y disecciona cada una de sus experiencias para mostrárnoslas desde un prisma cuasianalítico repleto de emociones y afectos. Un prisma que engloba las situaciones y el entorno en las que se producen, y que no olvida que su estudio se centra en individuos que están donde están por alguna razón, individuos que Wiener retrata con el cariño que un padre muestra por sus hijos, ese cariño que finalmente ella mostrará por el producto de su embarazo. Y todo en primera persona, tan en primera persona que da miedo.
Viaje de conocimiento que todavía no para. Sexografías tiene blog propio donde Wiener anota cada uno de los acontecimientos que se producen respecto a ese libro, así como las columnas que publica periódicamente en El país. A mi me parece todo una delicia, aunque sólo sea por la capacidad de asumir elegantemente el riesgo. Mi más sincera enhorabuena.

2 comentarios:

dvd dijo...

Quizá no sea que se escribe demasiado, sino demasiado mal. Es como en la vida, venimos influidos del estilo "playboy" y creemos que todo ocurre igual... Así nos va, claro.

Groupiedej dijo...

Dios, espero que no sea cierto...